Agricultura regenerativa: Inicio y prácticas agrícolas para llevarla a cabo
¿Qué es la agricultura regenerativa?
Índice de contenidos
¿Es la primera vez que lees sobre ella?
La agricultura regenerativa es un enfoque de producción agrícola que se centra en la restauración y mejora de los ecosistemas agrícolas y la salud del suelo. A diferencia de los métodos convencionales de agricultura que a menudo agotan los recursos naturales y dañan el medio ambiente, la agricultura regenerativa busca trabajar en armonía con la naturaleza para promover la biodiversidad, la resiliencia del ecosistema y la sostenibilidad a largo plazo.
Los beneficios de la agricultura regenerativa son numerosos. Al mejorar la salud del suelo, se puede aumentar la productividad de los cultivos, reducir la erosión y la contaminación del agua, y promover la resistencia a las sequías y las inundaciones. Además, la agricultura regenerativa puede ayudar a mitigar el cambio climático al capturar y almacenar carbono en el suelo, lo que contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Este enfoque también puede tener impactos positivos en la comunidad agrícola al fomentar la participación activa de los agricultores, promover la resiliencia económica y fortalecer los vínculos entre los productores y los consumidores locales.
¿Cuál es el principio básico de la agricultura regenerativa?
El principio básico de la agricultura regenerativa es trabajar en armonía con la naturaleza para restaurar y mejorar los ecosistemas agrícolas y la salud del suelo. En lugar de agotar los recursos naturales y dañar el medio ambiente, la agricultura regenerativa busca crear sistemas agrícolas sostenibles y resilientes.
Este enfoque de producción se enfoca en aumentar la materia orgánica del suelo, mejorar su estructura y aumentar su capacidad de retención de agua. Para ello, se promueve el uso de prácticas como la agricultura de conservación, la rotación de cultivos, la utilización de abonos orgánicos y la minimización del laboreo del suelo.
Por otra parte, busca promover la presencia de diferentes especies de plantas y animales, incluyendo cultivos variados, y preservar los hábitats naturales en las áreas agrícolas. Esto aumenta la resistencia a las plagas y enfermedades, y promueve la polinización y la fertilidad del suelo.
Además, la agricultura regenerativa busca reducir la dependencia de productos químicos sintéticos, como pesticidas y fertilizantes, En su lugar, se prioriza el uso de métodos naturales y orgánicos para controlar plagas y enfermedades (rotación de cultivos, el manejo integrado de plagas y el uso de abonos orgánicos).
Otro de los principios de la agricultura regenerativa consiste en fomentar la integración de cultivos con la utilización de pastoreo regenerativo, donde los animales se manejan de manera planificada y rotativa para mejorar la salud del suelo y la biodiversidad. También se promueve la integración de árboles y arbustos en los sistemas agrícolas para proporcionar sombra, protección contra el viento y hábitats para la fauna.
Debes saber que estos principios básicos de la agricultura regenerativa se aplican de manera adaptativa y flexible, teniendo en cuenta las condiciones locales y las necesidades de cada sistema agrícola. El objetivo principal es restaurar y fortalecer la salud de los ecosistemas agrícolas, promoviendo la sostenibilidad a largo plazo y la producción de alimentos saludables y nutritivos.
Prácticas agrícolas de la agricultura regenerativa
Las prácticas de la agricultura regenerativa incluyen:
- Agricultura de conservación: Minimizar la perturbación del suelo a través de técnicas como el mínimo laboreo o labranza cero. Esto ayuda a mejorar la estructura del suelo, reducir la erosión y mantener la biodiversidad microbiana del suelo.
- Rotación de cultivos: Implica alternar diferentes cultivos en una secuencia planificada en el tiempo y el espacio. ¿Te perdiste nuestro artículo Guía para la rotación de cultivos: importancia, beneficios y consejos prácticos? Conoce todo lo que tienes que saber sobre esta práctica de la mano del blog de Lamastore.
- Cultivos de cobertura: Estos se cultivan principalmente para cubrir y proteger el suelo entre las cosechas principales. Estas plantas pueden ser leguminosas como la alfalfa o plantas de raíces profundas como el nabo forrajero. Ayudan a prevenir la erosión del suelo, mejoran su estructura, aumentan la materia orgánica y promueven la fijación de nitrógeno.
- Pastoreo regenerativo: Esta práctica implica el manejo planificado y rotativo del ganado en áreas de pastoreo. Los animales se mueven de manera regular entre diferentes parcelas, permitiendo que la vegetación se recupere y regenere.
- Agroforestería: Consiste en la integración de árboles y arbustos en los sistemas agrícolas para proporcionar sombra, protección contra el viento, estabilizar el suelo, mejorar la retención de agua y capturar carbono de la atmósfera.
- Uso de abonos orgánicos como compost, estiércol animal o restos de cultivos. Estos abonos orgánicos aportan nutrientes al suelo y mejoran su estructura, sin dañar el medio ambiente ni la salud humana.
Estas son solo algunas de las prácticas agrícolas más comunes en la agricultura regenerativa. Como agricultor regenerativo también puedes adaptar y combinar estas prácticas de acuerdo con las condiciones locales.
Gestión del agua en la agricultura regenerativa
La gestión del agua desempeña un papel fundamental en la agricultura regenerativa, ya que esta práctica busca optimizar el uso del agua y promover su conservación. Algunas prácticas relacionadas con la gestión del agua en la agricultura regenerativa incluyen:
- Implementación de medidas para conservar y captar el agua de lluvia: Construcción de terrazas, zanjas de infiltración, embalses o estanques de retención para captar y almacenar el agua de lluvia. Estas estructuras permiten que el agua se infiltre en el suelo, recargando los acuíferos y asegurando su disponibilidad para los cultivos.
- Se promueve el uso de técnicas de riego eficiente, como el riego por goteo o el riego por aspersión de baja presión. ¿Sabías que es aquí donde entra en acción Lama con sus sistemas de filtrados? Desde Lama te asesoramos y proporcionamos lo que necesitas para que montes tu sistema de riego con filtros de anillas, filtros de arena o filtros de malla. Junto al trabajo que hacen estos filtros para riego, las válvulas hidráulicas son un accesorio que te ayudarán a gestionar el flujo de agua. De esta forma puedes abrir, cerrar o regular la presión del agua según las necesidades de tu cultivo. Por último, para que el riego sea de lo más eficiente, las válvulas de limpieza ayudarán a tu sistema de filtrado a tener una larga vida, eliminando la suciedad que se quede en su interior.
Estos métodos de riego proporcionan agua directamente a las raíces de las plantas de manera controlada, reduciendo la evaporación y minimizando el desperdicio de agua. El monitoreo regular de la humedad del suelo también ayuda a evitar el riego excesivo.
- Manejo de la escorrentía para la infiltración del agua en el suelo con la siembra de cultivos de cobertura y la creación de barreras vegetativas en las laderas para frenar la velocidad del agua y permitir su absorción en el suelo.
- Planificación y monitoreo del riego teniendo en cuenta las necesidades hídricas de los cultivos en sus diferentes etapas de crecimiento. Se realiza un monitoreo regular de la humedad del suelo para determinar cuándo y cuánta agua es necesaria, evitando el riego excesivo y garantizando un uso eficiente del agua.
Desde Lamastore te ayudamos a que la gestión del agua en la agricultura regenerativa tenga como resultado un uso sostenible, minimizando su desperdicio y maximizando su eficiencia.